Salmos 56: Confío en Dios y alabo su palabra.
1 Al Músico principal: sobre La paloma silenciosa en paraje muy distante. Michtam de David, cuando los Filisteos le prendieron en Gath. TEN misericordia de mí, oh Dios, porque me devoraría el hombre: Me oprime combatiéndome cada día.
2 Apúranme mis enemigos cada día; Porque muchos son los que pelean contra mí, oh Altísimo.
3 En el día que temo, Yo en ti confío.
4 En Dios alabaré su palabra: En Dios he confiado, no temeré Lo que la carne me hiciere.
5 Todos los días me contristan mis negocios; Contra mí son todos sus pensamientos para mal.
6 Reúnense, escóndense, Miran ellos atentamente mis pasos, Esperando mi vida.
7 ¿Escaparán ellos por la iniquidad? Oh Dios, derriba en tu furor los pueblos.
8 Mis huídas has tú contado: Pon mis lágrimas en tu redoma: ¿No están ellas en tu libro?
9 Serán luego vueltos atrás mis enemigos el día que yo clamare: En esto conozco que Dios es por mí.
10 En Dios alabaré su palabra; En Jehová alabaré su palabra.
11 En Dios he confiado: no temeré Lo que me hará el hombre.
12 Sobre mí, oh Dios, están tus votos: Te tributaré alabanzas.
13 Porque has librado mi vida de la muerte, Y mis pies de caída, Para que ande delante de Dios En la luz de los que viven.
Reflexión por Noemi Dominguez:
“Ciertamente cumpliré los votos que he hecho ante ti, Señor, y te presentaré mis ofrendas de gratitud por tu ayuda” [Versículo 12, Nueva Biblia Viva]. ¡Gracias es una palabra mágica! La semana pasada el vecino de enfrente nos traje un canasto con una fruta que nos gusta mucho y no se consigue fácilmente. El y su familia son de origen árabe, posiblemente musulmanes de religión, y muy tímidos en sus relaciones con los que les rodeamos. Sin embargo, al expresarles nuestra gratitud, sus rostros se llenaron de una genuina alegría. “La gratitud puede convertir una comida en una fiesta, una casa en un hogar, [y] un extraño en un amigo”. [Melody Beattie]. La gratitud expresa una de nuestras emociones más básicas. El ser agradecido no es una abstracción; la gratitud es una emoción genuina. No se puede exigir ni forzar. O lo sientes o no lo sientes. Que diferente es nuestro día cuando por cada acción, por simple que sea, escuchamos que nos dicen: ¡Gracias! Y cuan fácilmente podemos impactar la actitud de quien nos atiente en el supermercado, en el restaurante, en el banco o en nuestro propio hogar, simplemente diciendo ¡gracias! Podemos [y debemos] aprender a decir gracias, como nuestras madres nos enseñaron de pequeños pero el sentimiento de gratitud es genuino cuando nos damos cuenta de que hemos recibido más de lo que merecemos. “Algunas personas se quejan de que las rosas tienen espinas; Estoy agradecido de que las espinas tengan rosas.” [Alphonse Karr].
Psalms 56: Prayer for Relief from Tormentors.
1 Be merciful unto me, O God: for man would swallow me up; he fighting daily oppresseth me.
2 Mine enemies would daily swallow me up: for they be many that fight against me, O thou most High.
3 What time I am afraid, I will trust in thee.
4 In God I will praise his word, in God I have put my trust; I will not fear what flesh can do unto me.
5 Every day they wrest my words: all their thoughts are against me for evil.
6 They gather themselves together, they hide themselves, they mark my steps, when they wait for my soul.
7 Shall they escape by iniquity? in thine anger cast down the people, O God.
8 Thou tellest my wanderings: put thou my tears into thy bottle: are they not in thy book?
9 When I cry unto thee, then shall mine enemies turn back: this I know; for God is for me.
10 In God will I praise his word: in the Lord will I praise his word.
11 In God have I put my trust: I will not be afraid what man can do unto me.
12 Thy vows are upon me, O God: I will render praises unto thee.
13 For thou hast delivered my soul from death: wilt not thou deliver my feet from falling, that I may walk before God in the light of the living?
Reflexion by Noemi Dominguez:
“O God, I will offer you what I have promised; I will give you my offering of thanksgiving,”[Verse 12, Good News Translation]. Thank you are two magic words! Last week the neighbor across the street brought us a basket with a fruit that we like very much and is not easily found in supermarkets. He and his family are of Arab origin, possibly Muslims of religion, and very timid in their relationships with those around them. However, as we expressed our gratitude to them, their faces lit up with genuine joy. “Gratitude can turn a meal into a feast, a house into a home, [and] a stranger into a friend.” [Melody Beattie]. Gratitude expresses one of our most basic emotions. Being grateful is not an abstraction; gratitude is a genuine emotion. It cannot be demanded or forced. You either feel it or you don’t. How different is our day when for every action, no matter how simple, we hear someone say to us: Thank you! And how easily we can impact the attitude of those who serve us in the supermarket, in the restaurant, in the bank or in our own home, simply by saying: thank you! We can [and should] learn to say thank you, as our mothers taught us as children, but the feeling of gratitude is genuine when we realize that we have received more than we deserve. “Some people grumble that roses have thorns; I am grateful that thorns have roses.” [Alphonse Karr].
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