Salmos 119 (Beth 9-16) En tus mandamientos meditaré

Salmos 119 (Beth 9-16) En tus mandamientos meditaré.

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9 ¿Con qué limpiará el joven su camino? Con guardar tu palabra.

10 Con todo mi corazón te he buscado: No me dejes divagar de tus mandamientos.

11 En mi corazón he guardado tus dichos, Para no pecar contra ti.

12 Bendito tú, oh Jehová: Enséñame tus estatutos.

13 Con mis labios he contado Todos los juicios de tu boca.

14 Heme gozado en el camino de tus testimonios, Como sobre toda riqueza.

15 En tus mandamientos meditaré, Consideraré tus caminos.

16 Recrearéme en tus estatutos: No me olvidaré de tus palabras.

Reflexión por Noemi Dominguez:

“Los errores son el puente habitual entre la inexperiencia y la sabiduría. ” [Phyllis Theroux]. “La juventud es una intoxicación continua; es la fiebre de la razón.” [François De La Rochefoucauld]. Pero no siempre es así y hay alternativas, hay un camino mejor: “¿Cómo podrá el joven llevar una vida limpia? ¡Viviendo de acuerdo con tu palabra! ” [versículo 9, Versión Dios Habla Hoy]. Lamentablemente la pureza no está en lista de valores en la cultura moderna y el joven está muy expuesto continuamente a diversas tentaciones. La falta de madurez le impide contener sus impulsos. La respuesta no está solamente en la lectura diaria de las Sagradas Escrituras, o la asistencia a la iglesia o una gran labor social. La palabra debe calar más profundo: “En mi corazón he guardado tus dichos, para no pecar contra ti. ” [versículo 11, Versión Reina Varela 1960]. Es la obediencia a los principios Bíblicos impulsada por el temor al Señor que prepara el camino para que el Espíritu Santo haga la obra de protección, tanto en los jóvenes como en los adultos. “Por lo tanto, vivan como hijos obedientes de Dios. No vuelvan atrás, a su vieja manera de vivir, con el fin de satisfacer sus propios deseos. Antes lo hacían por ignorancia, pero ahora sean santos en todo lo que hagan, tal como Dios, quien los eligió, es santo. ” [1 Pedro 1:14-15, Nueva Traducción Viviente]. Señor, pongo en tus manos a mis hijos y a mis nietos, abre sus ojos espirituales para que se aferren a Tu Palabra a todo lo que enemigo les exponga y digan si a todo lo que Tu Palabra les enseña.

Psalms 119 (Beth 9-16): I will meditate on Your precepts.

9 Wherewithal shall a young man cleanse his way? by taking heed thereto according to thy word.

10 With my whole heart have I sought thee: O let me not wander from thy commandments.

11 Thy word have I hid in mine heart, that I might not sin against thee.

12 Blessed art thou, O Lord: teach me thy statutes.

13 With my lips have I declared all the judgments of thy mouth.

14 I have rejoiced in the way of thy testimonies, as much as in all riches.

15 I will meditate in thy precepts, and have respect unto thy ways.

16 I will delight myself in thy statutes: I will not forget thy word.

Reflexion by Noemi Dominguez:

” Mistakes are the usual bridge between inexperience and wisdom. ” [Phyllis Theroux]. ” Youth is a continual intoxication; it is the fever of reason.” [François De La Rochefoucauld]. But this is not always the case and there are alternatives, there is a better way: “Young people can live a clean life by obeying your word. “[verse 9, Common English Version]. Purity is not on the list of values of modern culture, and the young man is continually exposed to various temptations. Lack of maturity prevents him from containing his impulses. The answer lies not only in daily reading of the Holy Scriptures, or attending church or doing great social work. The word must penetrate deeper: “Your word I have treasured and stored in my heart, That I may not sin against You ” [verse 11, Amplified Bible]. It is obedience to Biblical principles driven by fear of the Lord that prepares the way for the Holy Spirit to do the work of protection in both young and old. “In the past you did not have the understanding you have now, so you did the evil things you wanted to do. But now you are children of God, so you should obey him and not live the way you did before. Be holy in everything you do, just as God is holy. He is the one who chose you.”[1 Peter 1:14-15, Esay-to-Read Translation]. Lord, I place my children and grandchildren in Your hands, open their spiritual eyes so that they cling to Your Word and say no to everything that enemy exposes them to and say yes to everything Your Word teaches them.