Salmos 60: Oración en que se pide la ayuda divina.
1 Al Músico principal: sobre Susan-Heduth: Michtam de David, para enseñar, cuando tuvo guerra contra Aram-Naharaim y contra Aram de Soba, y volvió Joab, é hirió de Edom en el valle de las Salina doce mil. OH Dios, tú nos has desechado, nos disipaste; Te has airado: vuélvete á nosotros.
2 Hiciste temblar la tierra, abrístela: Sana sus quiebras, porque titubea.
3 Has hecho ver á tu pueblo duras cosas: Hicístenos beber el vino de agitación.
4 Has dado á los que te temen bandera Que alcen por la verdad. (Selah.)
5 Para que se libren tus amados, Salva con tu diestra, y óyeme.
6 Dios pronunció por su santuario; yo me alegraré; Partiré á Sichêm, y mediré el valle de Succoth.
7 Mío es Galaad, y mío es Manasés; Y Ephraim es la fortaleza de mi cabeza; Judá, mi legislador;
8 Moab, la vasija de mi lavatorio; Sobre Edom echaré mi zapato: Haz júbilo sobre mí, oh Palestina.
9 ¿Quién me llevará á la ciudad fortalecida? ¿Quién me llevará hasta Idumea?
10 Ciertamente, tú, oh Dios, que nos habías desechado; Y no salías, oh Dios, con nuestros ejércitos.
11 Danos socorro contra el enemigo, Que vana es la salud de los hombres.
12 En Dios haremos proezas; Y él hollará nuestros enemigos.
Reina-Valera Antigua (RVA)
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Reflexión por Noemi Dominguez:
Peor que la derrota fue la sensación de separación de Dios. “El pueblo de Dios vive una existencia sin sentido sin su presencia. Se toman la derrota en serio, porque el abandono divino es la condición más miserable”. Van Gemeren escribe. Pero David rebota inmediatamente: Dios nuestro, tú nos has desechado; en tu enojo, nos has dejado sin defensas. ¡Vuélvete ahora a nosotros! ahora restaurarnos! Esa es la historia de la redención: restáuranos. Entramos en la historia divina derrotados por el pecado. Tenemos nuestro primer encuentro real con Dios a través de la convicción del pecado por el Espíritu Santo. A menos que Dios nos revele nuestra condición perdida, a menos que nos demos cuenta de que estamos enfermos no buscamos un médico, en palabras de Jesús: Mateo 9:12 “Son los enfermos los que necesitan un médico, no los que están sanos. Cuando David se dio cuenta de su derrota moral oró: restaura el gozo de mi salvación. Dios está en el negocio de la remodelación, restaura el corazón roto. Siempre he sido bendecido por Isaías 58:12 – parafraseado por el Mensaje: Serás como un jardín bien regado, un manantial que nunca se secará. Usarás los viejos escombros de vidas pasadas para construir de nuevo, reconstruir los cimientos de tu pasado. Usted será conocido como aquellos que pueden arreglar cualquier cosa, restaurar ruinas antiguas, reconstruir y renovar, para hacer la comunidad habitable de nuevo. Dios también quiere restaurar tu vida. Puede que estés caído, pero no derrotado. puedes haber perdido una batalla, pero Él ha ganado la guerra! De vuelta a Psalm 60 versículo 4, la Biblia amplificada: Has dado a tus fieles la señal de retirada para que se libren de las flechas enemigas Y Su estandarte sobre nosotros es el amor. Lo único que la ley puede hacer sobre el pecado es condenar, pero la gracia restaura a través del amor.
Psalm 60: Urgent Prayer for the Restored Favor of God.
1 O God, thou hast cast us off, thou hast scattered us, thou hast been displeased; O turn thyself to us again.
2 Thou hast made the earth to tremble; thou hast broken it: heal the breaches thereof; for it shaketh.
3 Thou hast shewed thy people hard things: thou hast made us to drink the wine of astonishment.
4 Thou hast given a banner to them that fear thee, that it may be displayed because of the truth. Selah.
5 That thy beloved may be delivered; save with thy right hand, and hear me.
6 God hath spoken in his holiness; I will rejoice, I will divide Shechem, and mete out the valley of Succoth.
7 Gilead is mine, and Manasseh is mine; Ephraim also is the strength of mine head; Judah is my lawgiver;
8 Moab is my washpot; over Edom will I cast out my shoe: Philistia, triumph thou because of me.
9 Who will bring me into the strong city? who will lead me into Edom?
10 Wilt not thou, O God, which hadst cast us off? and thou, O God, which didst not go out with our armies?
11 Give us help from trouble: for vain is the help of man.
12 Through God we shall do valiantly: for he it is that shall tread down our enemies.
King James Version (KJV)
Public Domain
Reflexion by Noemi Dominguez:
Worse than defeat was the sense of separation from God. “God’s people live a meaningless existence without his presence. They take defeat seriously, because divine abandonment is the most miserable condition.” Van Gemeren writes. But David immediately rebounds: You have rejected us, God, and burst upon us; you have been angry—now restore us! That is the story of redemption: restore us. We enter the Divine story defeated by sin. We have our first real encounter with God through the conviction of sin by the Holy Spirit. Unless God reveals to us our broken condition, unless we realize we are sick we don’t seek a doctor for, in Jesus’ own words: Mathew 9:12 “It is the sick people who need a doctor, not those who are healthy. When David realized of his moral defeat he prayed: restore the joy of my salvation. God is in the remodeling business, he restores the broken hearted. I’ve always been blessed by Isaiah 58:12 – paraphrased by the Message: You’ll be like a well-watered garden, a gurgling spring that never runs dry. You’ll use the old rubble of past lives to build anew, rebuild the foundations from out of your past. You’ll be known as those who can fix anything, restore old ruins, rebuild and renovate, make the community livable again. God wants to restore your life too. You may be down but not out. You may have lost a battle but He has won the war! Back to Psalm 60 verse 4, the amplified Bible: You have set up a banner for those who fear You [with awe-inspired reverence and submissive wonder—a banner to shield them from attack], A banner that may be displayed because of the truth. And His banner over us is love. The only thing the law can do about sin is to condemn but grace restores through love.
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