Eclesiastés 1: Todo es vanidad.
1 PALABRAS del Predicador, hijo de David, rey en Jerusalem.
2 Vanidad de vanidades, dijo el Predicador; vanidad de vanidades, todo vanidad.
3 ¿Qué provecho tiene el hombre de todo su trabajo con que se afana debajo del sol?
4 Generación va, y generación viene: mas la tierra siempre permanece.
5 Y sale el sol, y pónese el sol, y con deseo vuelve á su lugar donde torna á nacer.
6 El viento tira hacia el mediodía, y rodea al norte; va girando de continuo, y á sus giros torna el viento de nuevo.
7 Los ríos todos van á la mar, y la mar no se hinche; al lugar de donde los ríos vinieron, allí tornan para correr de nuevo.
8 Todas las cosas andan en trabajo mas que el hombre pueda decir: ni los ojos viendo se hartan de ver, ni los oídos se hinchen de oir.
9 ¿Qué es lo que fué? Lo mismo que será. ¿Qué es lo que ha sido hecho? Lo mismo que se hará: y nada hay nuevo debajo del sol.
10 ¿Hay algo de que se pueda decir: He aquí esto es nuevo? Ya fué en los siglos que nos han precedido.
11 No hay memoria de lo que precedió, ni tampoco de lo que sucederá habrá memoria en los que serán después.
12 Yo el Predicador fuí rey sobre Israel en Jerusalem.
13 Y dí mi corazón á inquirir y buscar con sabiduría sobre todo lo que se hace debajo del cielo: este penoso trabajo dió Dios á los hijos de los hombres, en que se ocupen.
14 Yo miré todas las obras que se hacen debajo del sol; y he aquí, todo ello es vanidad y aflicción de espíritu.
15 Lo torcido no se puede enderezar; y lo falto no puede contarse.
16 Hablé yo con mi corazón, diciendo: He aquí hállome yo engrandecido, y he crecido en sabiduría sobre todos los que fueron antes de mí en Jerusalem; y mi corazón ha percibido muchedumbre de sabiduría y ciencia.
17 Y dí mi corazón á conocer la sabiduría, y también á entender las locuras y los desvaríos: conocí que aun esto era aflicción de espíritu.
18 Porque en la mucha sabiduría hay mucha molestia; y quien añade ciencia, añade dolor.
Reflexión por Noemi Dominguez:
La epidemia de polio asoló a un país sudamericano en 1956. Se registraron 6500 casos, todos los árboles se pintaron con cal y a los niños se les daba una bolsita de alcanfor como “solución.” El brote había comenzado a finales del año anterior y atacó sobre todo a los más chicos. El diez por ciento de los afectados murió. Y muchos quedaron con secuelas como la parálisis. El descubrimiento y difusión de la vacuna creada por Jonás Salk y perfeccionada por Albert Sabin hizo que la enfermedad fuera desapareciendo.” [Infobae]. “La gente de hoy en día ni se acuerda de lo que sucedió hace mucho tiempo. En el futuro, la gente no recordará lo que está sucediendo ahora. Y más tarde, la gente de otras épocas no sabrá lo que hicieron los que vivieron antes que ellos.” [versículo 11, Palabra de Dios para Todos]. Así son las cosas debajo del sol, como las vemos los humanos. La polio, que en mi niñez conmovió y atemorizó a todo el país, hoy es parte de la rutina médica de los recién nacidos y nadie habla de ello. No por eso debemos dejar de hacer lo que Dios nos llama a hacer. En primer lugar, el mundo se olvidará, pero Dios no se olvidará del testimonio que diste para que una persona recibiera el regalo de la vida eterna, o el consejo que salvó su matrimonio, o que acompañaste a alguien en un momento especial en su vida, o que le prestaste tu mejor vestido a alguien cuando no podía adquirirlo para usarlo en un día especial, o que llevaste comida a una familia que estaba atravesando una crisis. Nada, absolutamente nada, ni siquiera un vaso de agua quedará sin recompensa. [Marcos 9:41]. Si Dios puso algo en tu corazón, ¡hazlo hoy según tus fuerzas!
Ecclesiastes 1: The Vanity of Life.
1 The words of the Preacher, the son of David, king in Jerusalem.
2 Vanity of vanities, saith the Preacher, vanity of vanities; all is vanity.
3 What profit hath a man of all his labour which he taketh under the sun?
4 One generation passeth away, and another generation cometh: but the earth abideth for ever.
5 The sun also ariseth, and the sun goeth down, and hasteth to his place where he arose.
6 The wind goeth toward the south, and turneth about unto the north; it whirleth about continually, and the wind returneth again according to his circuits.
7 All the rivers run into the sea; yet the sea is not full; unto the place from whence the rivers come, thither they return again.
8 All things are full of labour; man cannot utter it: the eye is not satisfied with seeing, nor the ear filled with hearing.
9 The thing that hath been, it is that which shall be; and that which is done is that which shall be done: and there is no new thing under the sun.
10 Is there any thing whereof it may be said, See, this is new? it hath been already of old time, which was before us.
11 There is no remembrance of former things; neither shall there be any remembrance of things that are to come with those that shall come after.
12 I the Preacher was king over Israel in Jerusalem.
13 And I gave my heart to seek and search out by wisdom concerning all things that are done under heaven: this sore travail hath God given to the sons of man to be exercised therewith.
14 I have seen all the works that are done under the sun; and, behold, all is vanity and vexation of spirit.
15 That which is crooked cannot be made straight: and that which is wanting cannot be numbered.
16 I communed with mine own heart, saying, Lo, I am come to great estate, and have gotten more wisdom than all they that have been before me in Jerusalem: yea, my heart had great experience of wisdom and knowledge.
17 And I gave my heart to know wisdom, and to know madness and folly: I perceived that this also is vexation of spirit.
18 For in much wisdom is much grief: and he that increaseth knowledge increaseth sorrow.
Reflexion by Noemi Dominguez:
The polio epidemic ravaged a South American country in 1956. 6500 cases were recorded, all the trees were painted with lime and the children were given a bag of camphor as a “solution”. ” The outbreak had started at the end of the previous year and attacked mostly the youngest. Ten percent of those affected died and many others with were affected with paralysis. The discovery and dissemination of the vaccine created by Jonas Salk and perfected by Albert Sabin made the disease disappear. ” [Infobae]. “People today don’t even remember what happened a long time ago. In the future, people will not remember what is happening now. And later, people of other times will not know what those who lived before them did. “[verse 11, God’s Word to All]. This is how things are under the sun, as we humans see them. Polio, which in my childhood moved and frightened the whole country, today is part of the medical routine of newborns and nobody talks about it. That does not mean that we should stop doing what God calls us to do. It may well be forgotten by the world, but God will not forget the testimony you gave to a person the testimony that He used to give someone the gift of eternal life, or the counsel that saved a marriage, or that you stood by someone at a special time in his or her life, or that you lent your best dress to someone when she couldn’t afford to buy one for a special day, or that you brought food to a family in a crisis. Nothing, absolutely nothing, not even a glass of water will go unrewarded. [Mark 9:41]. If God put something in your heart, do it today according to your strength!
0 Comments