1 Crónicas 22: 1-10: Preparativos para el templo.
1 Y DIJO David: Esta es la casa de Jehová Dios, y este es el altar del holocausto para Israel.
2 Después mandó David que se juntasen los extranjeros que estaban en la tierra de Israel, y señaló de ellos canteros que labrasen piedras para edificar la casa de Dios.
3 Asimismo aparejó David mucho hierro para la clavazón de las puertas, y para las junturas; y mucho metal sin peso, y madera de cedro sin cuenta.
4 Porque los Sidonios y Tirios habían traído á David madera de cedro innumerable.
5 Y dijo David: Salomón mi hijo es muchacho y tierno, y la casa que se ha de edificar á Jehová ha de ser magnífica por excelencia, para nombre y honra en todas las tierras; ahora pues yo le aparejaré lo necesario. Y preparó David antes de su muerte en grande abundancia.
6 Llamó entonces David á Salomón su hijo, y mandóle que edificase casa á Jehová Dios de Israel.
7 Y dijo David á Salomón: Hijo mío, en mi corazón tuve el edificar templo al nombre de Jehová mi Dios.
8 Mas vino á mí palabra de Jehová, diciendo: Tú has derramado mucha sangre, y has traído grandes guerras: no edificarás casa á mi nombre, porque has derramado mucha sangre en la tierra delante de mí:
9 He aquí, un hijo te nacerá, el cual será varón de reposo, porque yo le daré quietud de todos sus enemigos en derredor; por tanto su nombre será Salomón; y yo daré paz y reposo sobre Israel en sus días:
10 El edificará casa á mi nombre, y él me será á mí por hijo, y yo le seré por padre; y afirmaré el trono de su reino sobre Israel para siempre.
Reflexión por Noemi Dominguez:
“Tú y yo siempre tendremos asuntos pendientes [de terminar]. Hay demasiadas palabras sin decir, Demasiados pensamientos que no hemos sentido, y demasiados sentimientos que no hemos expresados.” [Insha Juneja]. Es evidente que el fuego de la pasión por construir un templo al Señor nunca se apagó en el corazón de David. Su reflexión tiempo antes había hecho mella en su mente: “—Mira, yo habito en un palacio de cedro, mientras que el arca de la alianza del Señor está bajo simples cortinas.” [1 Crónicas 17:1, Dios Habla Hoy]. Quizás uno de los más grandes logros de David como padre fue su capacidad de pasar a la próxima generación su sueño de construir un templo al Señor. “El liderazgo se trata de mejorar a los demás como resultado de tu presencia y asegurarse de que el impacto perdure en tu ausencia.” [Sheryl Sandberg]. Fue un logro porque muchas veces hay hijos frustrados por haber sido forzados a perseguir los sueños de sus padres. No así Salomón, quien de alguna manera captó e hizo propio el deseo de su padre, quien solo no se desalentó ni abandonó la idea, David compró el terreno y preparó los materiales para que Salomón, su hijo, lo construyera. “”Si sientes que hay algo … que se supone que debes hacer, si tienes pasión por ello, entonces deja de desear y simplemente hazlo”. [Wanda Sykes]; hazlo con todas tus fuerzas y así verán tus hijos tu pasión y quizás por ello, ellos sigan tus sueños y se cumplan tus oraciones.
1 Chronicles 22: David Prepares to Build the Temple.
1 Then David said, This is the house of the Lord God, and this is the altar of the burnt offering for Israel.
2 And David commanded to gather together the strangers that were in the land of Israel; and he set masons to hew wrought stones to build the house of God.
3 And David prepared iron in abundance for the nails for the doors of the gates, and for the joinings; and brass in abundance without weight;
4 Also cedar trees in abundance: for the Zidonians and they of Tyre brought much cedar wood to David.
5 And David said, Solomon my son is young and tender, and the house that is to be builded for the Lord must be exceeding magnifical, of fame and of glory throughout all countries: I will therefore now make preparation for it. So David prepared abundantly before his death.
6 Then he called for Solomon his son, and charged him to build an house for the Lord God of Israel.
7 And David said to Solomon, My son, as for me, it was in my mind to build an house unto the name of the Lord my God:
8 But the word of the Lord came to me, saying, Thou hast shed blood abundantly, and hast made great wars: thou shalt not build an house unto my name, because thou hast shed much blood upon the earth in my sight.
9 Behold, a son shall be born to thee, who shall be a man of rest; and I will give him rest from all his enemies round about: for his name shall be Solomon, and I will give peace and quietness unto Israel in his days.
10 He shall build an house for my name; and he shall be my son, and I will be his father; and I will establish the throne of his kingdom over Israel for ever.
Reflexion by Noemi Dominguez:
“You and I will always have unfinished business. There are too many unsaid words, too many thoughts we haven’t felt, and too many feelings we haven’t expressed.” [Insha Juneja]. It is evident that the fire of passion to build a temple to the Lord was never extinguished in David’s heart. His reflection had long before taken its toll on his mind: “—Look, I dwell in a cedar palace, while the ark of the covenant of the Lord is under mere curtains.” [1 Chronicles 17:1, God speaks today.] Perhaps one of David’s greatest accomplishments as a father was his ability to pass on to the next generation his dream of building a temple to the Lord. “Leadership is about improving others as a result of your presence and making sure the impact lasts in your absence.” [Sheryl Sandberg]. It was an achievement because many times there are children frustrated by being forced to pursue their parents’ dreams. Not so Solomon, who somehow grasped and made his own the desire of his father, who alone was not discouraged or abandoned the idea, David bought the land and prepared the materials for Solomon, his son, to build it. “If you feel there’s something… what you’re supposed to do, if you’re passionate about it, then stop wishing and just do it.” [Wanda Sykes]; Do it with all your strength and so your children will see your passion and perhaps because of that, they will follow your dreams and your prayers will be fulfilled.
0 Comments