Proverbios 5: Amonestación contra la impureza.
1 HIJO mío, está atento á mi sabiduría, Y á mi inteligencia inclina tu oído;
2 Para que guardes consejo, Y tus labios conserven la ciencia.
3 Porque los labios de la extraña destilan miel, Y su paladar es más blando que el aceite;
4 Mas su fin es amargo como el ajenjo, Agudo como cuchillo de dos filos.
5 Sus pies descienden á la muerte; Sus pasos sustentan el sepulcro:
6 Sus caminos son instables; no los conocerás, Si no considerares el camino de vida.
7 Ahora pues, hijos, oidme, Y no os apartéis de las razones de mi boca.
8 Aleja de ella tu camino, Y no te acerques á la puerta de su casa;
9 Porque no des á los extraños tu honor, Y tus años á cruel;
10 Porque no se harten los extraños de tu fuerza, Y tus trabajos estén en casa del extraño;
11 Y gimas en tus postrimerías, Cuando se consumiere tu carne y tu cuerpo,
12 Y digas: Cómo aborrecí el consejo, Y mi corazón menospreció la reprensión;
13 Y no oí la voz de los que me adoctrinaban, Y á los que me enseñaban no incliné mi oído!
14 Casi en todo mal he estado, En medio de la sociedad y de la congregación.
15 Bebe el agua de tu cisterna, Y los raudales de tu pozo.
16 Derrámense por de fuera tus fuentes, En las plazas los ríos de aguas.
17 Sean para ti solo, Y no para los extraños contigo.
18 Sea bendito tu manantial; Y alégrate con la mujer de tu mocedad.
19 Como cierva amada y graciosa corza, Sus pechos te satisfagan en todo tiempo; Y en su amor recréate siempre.
20 ¿Y por qué, hijo mío, andarás ciego con la ajena, Y abrazarás el seno de la extraña?
21 Pues que los caminos del hombre están ante los ojos de Jehová, Y él considera todas sus veredas.
22 Prenderán al impío sus propias iniquidades, Y detenido será con las cuerdas de su pecado.
23 El morirá por falta de corrección; Y errará por la grandeza de su locura.
Reflexión por Noemi Dominguez:
Se habla de una cuarta ola de Covid y, por qué no decirlo, de una cuarta vacuna. Las líneas de testeo interminables pero pareciera que los síntomas no son tan severos como los anteriores. Nos preguntamos si esto alguna vez terminará, o será como la influenza que varia año tras año y habrá que vacunarse todos los años o mantener fuerte el sistema inmunológico. Hay otra pandemia aun más letal que el Covid, se llama pecado en general y ha acosado a la humanidad desde el mismo Eden. El capitulo de hoy habla de una de esas variantes del pecado y es la inmoralidad sexual. En este caso, se trata del peligro de la mujer extraña y en nuestros días de la variante de la pornografía. Quizás nadie te ve pero el versículo 21 nos declara algo que ya sabemos pero no podemos dejar de decirlo: “Nuestros caminos están a la vista del Señor; él examina todas nuestras sendas.” Nuestro teléfono, y nuestra computadora también esta a la vista de Dios. Aléjate, apártate, no te acerques al portal enfáticamente dice el versículo 8. Siglos antes José, el hijo de Jacob en Egipto, huyó del sitio de la tentación [Génesis 39:11-12]. Siglos después confirma el Apóstol Pablo: “Huye de las pasiones juveniles” [2 Timoteo 2:22, Biblia de Jerusalén]. No hay vacuna para las adicciones sexuales pero podemos fortalecer el sistema inmunológico, continua diciendo el texto mencionado en la versión de la Biblia de las Américas: sigue la justicia, la fe, el amor y la paz, con los que invocan al Señor con un corazón puro. Los frutos de una vida llena del Espíritu Santo nos protegerán de esta pandemia de la cual nadie quiere hablar. Me queda como un eco las palabras del verso 7 y el comienzo del 8: Pues bien, hijo mío, préstame atención y no te apartes de mis palabras. Aléjate del mal y acércate a Dios.
Proverbs 5: The Peril of Adultery.
1 My son, attend unto my wisdom, and bow thine ear to my understanding:
2 That thou mayest regard discretion, and that thy lips may keep knowledge.
3 For the lips of a strange woman drop as an honeycomb, and her mouth is smoother than oil:
4 But her end is bitter as wormwood, sharp as a two-edged sword.
5 Her feet go down to death; her steps take hold on hell.
6 Lest thou shouldest ponder the path of life, her ways are moveable, that thou canst not know them.
7 Hear me now therefore, O ye children, and depart not from the words of my mouth.
8 Remove thy way far from her, and come not nigh the door of her house:
9 Lest thou give thine honour unto others, and thy years unto the cruel:
10 Lest strangers be filled with thy wealth; and thy labours be in the house of a stranger;
11 And thou mourn at the last, when thy flesh and thy body are consumed,
12 And say, How have I hated instruction, and my heart despised reproof;
13 And have not obeyed the voice of my teachers, nor inclined mine ear to them that instructed me!
14 I was almost in all evil in the midst of the congregation and assembly.
15 Drink waters out of thine own cistern, and running waters out of thine own well.
16 Let thy fountains be dispersed abroad, and rivers of waters in the streets.
17 Let them be only thine own, and not strangers’ with thee.
18 Let thy fountain be blessed: and rejoice with the wife of thy youth.
19 Let her be as the loving hind and pleasant roe; let her breasts satisfy thee at all times; and be thou ravished always with her love.
20 And why wilt thou, my son, be ravished with a strange woman, and embrace the bosom of a stranger?
21 For the ways of man are before the eyes of the Lord, and he pondereth all his goings.
22 His own iniquities shall take the wicked himself, and he shall be holden with the cords of his sins.
23 He shall die without instruction; and in the greatness of his folly he shall go astray.
Reflexion by Noemi Dominguez:
There is talk of a fourth wave of Covid and, why not say it, a fourth vaccine shot. There are endless lines of testing, but it seems that the symptoms are not as severe as the previous ones. We wonder if this will ever end, or will it be like the flu that varies year after year, and you will have to get vaccinated every year or keep your immune system strong. There is another pandemic even more lethal than Covid, it is called sin in general, and has beset humanity since Eden itself. Today’s chapter talks about one of the variants of the sin pandemic: sexual immorality. In this case, it is about the danger of the strange woman and in our days the variant of pornography. Perhaps no one sees you, but verse 21 tells us something we already know, but can’t help but say it: “For your ways are in full view of the Lord, and he examines all your paths.” [New International Version]. Our phone, and our computer are also in God’s sight. Run, walk away, turn away, don’t approach the portal, emphatically verse 8 says. Centuries earlier Joseph, Jacob’s son in Egypt, fled the site of temptation [Genesis 39:11-12]. Centuries later the Apostle Paul confirms, ” Flee also youthful lusts” [2 Timothy 2:22, BRG Bible Version] There is no vaccine for sexual addictions but we can strengthen the immune system, continues the text mentioned in the Amplified Version of the Bible: “pursue righteousness, faith, love, and peace with those [believers] who call on the Lord out of a pure heart.” The fruits of a life filled with the Holy Spirit will protect us from this pandemic that no one wants to talk about. I echo the words of verse 7 and the beginning of verse 8: So, my friend, listen closely; don’t treat my words casually. Keep your distance from such a woman; absolutely stay out of her neighborhood. Simple, turn away from evil and draw near to God!
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